MIRIAM SERRANO
La abogada penalista Yolanda Zamora Ramírez informó que es la presidente de la Asociación Civil Alas de Esperanza que apoya a las mujeres que se encuentran recluidas en el Centro de Reinserción Social (CERESO) Femenil de Cieneguillas en Zacatecas con acciones desde el ámbito emocional y la dotación de productos de primera necesidad.
Declaró a puntos suspensivos que esta asociación se constituyó en marzo de 2020 a raíz de la pandemia por COVID-19, misma que surgió como una inquietud entre varias compañeras como Verónica Aparicio y Claudia Yerena González del Instituto de la Defensoría Pública del que forma parte.
Este sector de la sociedad es muy vulnerable, afirmó al decir que muy pocas veces se visibiliza, que son las mujeres en prisión, pues ella defiende a toda aquella persona que no cuenta con recursos para poder contratar los servicios de un abogado y la defensoría pública atiende este tipo de sectores.
Detalló que el tema de las mujeres es un tanto olvidado, las mujeres en prisión están generalmente solas, no tienen visitas, la familia las abandona, no les llevan cosas, además, dijo que ha detectado un fenómeno donde las mujeres están siendo detenidas no por haber cometido el delito directamente sino porque van siendo arrastradas por su pareja, por su novio, esposo, incluso padres, hay familias completas ahí detenidas, reveló.
Esto fue lo que la motivó a apoyar, pues además este Cereso regularmente tenía una población de 50 o 60 internas, pero ahora se encuentra sobrepoblado con aproximadamente 180 mujeres, aunque destacó que este centro de penitenciario se encuentra certificado ante la Asociación Nacional de Correccionales de América, esto quiere decir que siguieron muchos protocolos y reglas que tienen que cumplirse.
Por lo anterior enfocaron sus esfuerzos en apoyar a las mujeres en prisión y así fue como inicia Alas de Esperanza, a través de la cual se intenta cubrir algunas de sus necesidades, pues son muchas.
Destacó que el centro penitenciario tiene su propio presupuesto, sin embargo, se triplicó la población, ya que han llegado a tener hasta 210 internas, cifra que es impresionante y que tienen que ver con el aumento de la delincuencia y el hecho de que en las cárceles distritales no pueden albergar a mujeres, por ello deben trasladarlas al Centro Femenil.
Ante esta situación, ellas necesitan objetos de higiene personal, shampoo, jabón hasta el rollo de papel por lo que se inició con colectas de este tipo de objetos, aunque hubo un giro, pues en marzo de este año, la abogada conoció a la presidente de Colegio de Trabajadores Sociales del Estado, Gabriela Rodríguez y ella se sumó a este esfuerzo en favor de las mujeres.
Gracias a ello ahora se dan talleres de tanatología, de yoga, de lectura y redacción, constelaciones familiares, lo que les ha servido mucho, pues dijo: “yo considero que es un regalo para el alma”, no solamente es el detalle que se les pueda dar, sino para que logren tener un equilibrio emocional, estabilidad.
Zamora Ramírez precisó que este tipo de actividades se realizan los sábados, por lo que previamente se hacen los trámites ante la Dirección de Prevención y Reinserción Social quienes autorizan las visitas para llevar a cabo diversas actividades que deben informarse con antelación.
Expuso que en el mes de enero realizaron un programa que se llamó Apadrina un niño, respecto de los menores que viven con ellas en el centro penitenciario, pues la ley les permite tenerlos ahí hasta los tres años de edad, aunque muchas mujeres, pues el 99 por ciento son mamás, no tienen a sus niños ahí.
Lo anterior, porque solo se puede cuando son bebés, actualmente informó que tienen una niña de cuatro meses y un bebé de siete meses, pero generalmente no quieren que estén con ellas, pues luego se los llevan las familias.
Buscan, dijo, no juzgarlas, no condenarlas, no estigmatizarlas sino tenerles una cierta empatía, escucharlas.
La abogada indicó que principalmente en el delito de secuestro, que está regulado por una ley Federal, la Ley General para Prevenir y Erradicar los Delitos en Materia de Secuestro, una ley, expresó, muy dura que no distingue pues “igual peca el que mata la vaca como el que le agarra la pata”, comentó.
Esto significa que hay un reparto de roles, todos los que funjan alguna función en el secuestro y desgraciadamente, dijo, a las mujeres las están deteniendo junto con el hombre, cuando tal vez se encuentran en la casa con la familia, o los detienen afuera y si andan con ellos, pues las arrastran también.
Precisó sobre un caso reciente donde la mujer fue detenida junto con su pareja y llevaban a sus hijos de dos y tres años, por lo que se los quitaron, los recoge el Sistema Estatal del Desarrollo Integral para la Familia (SEDIF) en Aguascalientes, les ponen medidas de protección para que ellos no vean a los niños, a pesar de que están detenidos, así que no pueden ver a sus hijos, lo que consideró una privación de derechos, no solo de los padres, sino también de los niños.
Reveló que hay mujeres que ya fueron condenadas hasta por 100 años de prisión, donde el hombre está sentenciado y ella también y los niños se quedan al amparo de familiares, o del estado a través de casas cuna, lo que puede generar el descuido de los niños y a la larga, puedan también cometer delitos lo que se vuelve un círculo vicioso.
Por ello, resaltó, los esfuerzos están dirigidos a levantar la autoestima de estas mujeres, mejorar su estado emocional mientras están recluidas, pues es difícil para el estado atender a tantas internas, pues aunque tienen áreas de psicología, está bien, pero es complicado llegar a tantas.
Alas de Esperanza busca atender la parte humana de las internas, pues hay muchas de ellas que caen en depresiones muy fuertes y este tipo de actividades las ayudan a ser escuchadas y motivarlas.
Yolanda Zamora dijo que todo esfuerzo es bienvenido por lo que invitó a la población a que se sumen y quienes así lo deseen pueden ponerse en contacto a través de sus redes sociales como Facebook e Instagram donde pueden encontrarlas como Alas de Esperanza.
Reiteró que debe de visibilizarse la situación que viven estas mujeres, pues son seres humanos que tal vez cometieron un error y que están pagando ante la ley, pero necesitan ser vistas por la sociedad para que, quienes puedan obtener su libertad puedan reinsertar a la sociedad.
La presidente puntualizó que, con los delitos de alto impacto, desde noviembre de 2022 y en marzo 2023 comenzaron a realizarse traslados masivos a otros centros penitenciarios, en el caso de Zacatecas se han llevado a aproximadamente 75 internas a Centros Federales que están en Morelos o en otras entidades, lo que resulta traumático para ellas porque están con el temor de quedar lejos de sus familiares.
Subrayó que en la entidad no se había dado el traslado de mujeres hasta el año pasado por la sobrepoblación que existe en el centro de internamiento, primero se llevaron a 54 y después a 29 y las que se quedan, es bajo angustia porque pueden ser las próximas.
Finalmente reiteró que todo lo que se pueda aportar a la asociación para apoyar a estas mujeres son bienvenidos.