No me gusta bailar
Pero por ti, mi amor
Bailo hasta el infinito
Hasta el mismísimo infierno
Con la única condición
Que tu mano sea mi guía
Para que con cada vuelta
Respire tu dulce aroma
Y con mi mano en tu cadera
Al son de la música
Verte deslumbrar
Y embelesarme con tu belleza
Tan divina y pura
Que se asemeja a la realeza
¡Oh amor mío!
No necesito ir al paraíso
Pues estoy en esta danza contigo.
MARCO ALEXANDER HERNÁNDEZ GONZÁLEZ