POR MIRIAM SERRANO
Puntos suspensivos entrevistó a dos mujeres líderes en su ámbito: Norma Castorena Berrelleza, titular de la Sección 39 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Secretaría de Salud (SNTSA), e Irma Alvarado, médico legista que trabaja en la Fiscalía General de Justicia del Estado (FGJE) de Zacatecas.
Ambas abordaron la situación por la que atraviesan en sus respectivos sectores y la necesidad de unir esfuerzos para que sus demandas laborales sean escuchadas.
Castorena Berrelleza destacó que su lucha y protesta escaló por la falta de atención de las autoridades de salud y gobierno del Estado.
Puntualizó que la FGJE y la Secretaría de Salud de Zacatecas (SSZ) se ven en la necesidad, ante la falta de respuesta de las autoridades, de tomar medidas más radicales porque las legítimas demandas que ambos persiguen son justas.
Dijo que “es muy triste que por levantar la voz por su gremio se reciban tantos ataques y represalias, pareciera que ser mujer les duele en el alma y que todavía salgas tú a decir lo que está pasando y cómo de manera tan misógina se van sobre uno”, aseveró.
Afirmó que lo que se defiende es la justicia laboral, el derecho que como trabajadores se tienen, además de ser áreas muy importantes, como la procuración de justicia y la salud, que no pueden estar en problemas
“Es lamentable que quien hoy tiene en sus manos la política interna de gobierno del Estado, Rodrigo Reyes Mugüerza, les dé la vuelta con tantos pretextos, evasivas para no atender un tema tan sensible como la salud”, afirmó.
Comentó que el enojo que hay de la sociedad es justamente hacia gobierno del Estado “por la falta de sensibilidad, porque no escuchan, pareciera que se tratara de un capricho de los trabajadores, piensan que es fácil sacar a la luz las cosas que se viven en el trabajo y cuando se hace es porque ya se agotaron todas las instancias internas que se tienen y la respuesta es no”.
Cargas “inhumanas”
La doctora Irma Alvarado explicó cómo es un día de trabajo de un perito en el Servicio Médico Forense, detalló que los perito criminalista de campo, saben a qué hora entran, pero no a qué hora sale, pues esto sucede 12 o 14 horas después, “estamos hablando de cargas de trabajo inhumanas”, agregó.
Acotó que si en un día de rol ante diferentes eventos sale uno por caso y, si se necesita, vuelven a salir, en ocasiones cada uno tiene hasta cuatro hechos que atender y si a las 12 de la noche hay que salir a Valparaíso, se van y lo hacen solos, sin un compañero, en vehículos deplorables, con llantas lisas, que no tienen focos, que fallan los frenos, pues a los peritos se les da lo que deja la Policía de Investigación (PDI).
Agregó que se les dan viáticos de 150 pesos y deben comprobarse, regresan hasta el día siguiente y son horas extras que no se pagan.
La doctora destacó la insensibilidad y la falta de empatía de los mandos superiores, desde coordinadores, directores y el propio fiscal, Francisco Murillo Ruiseco, quienes tampoco muestran interés por la salud mental del trabajador, “porque son seres humanos que sienten”.
Dijo que al escuchar la declaración del gobernador David Monreal Ávila, lo cual le da tristeza y espera que un día él acompañara a uno de los criminalistas, que viera las condiciones bajo las que trabajan “para que vea si son flojos, perezosos o que no quieren trabajar”.
Reprochan declaración de gobernador
La líder del sindicato de salud comentó que los trabajadores de salud no son flojos, pues recordó cómo el gobernador expresó que los trabajadores sindicalizados tenían un certificado de flojera porque tenían su base y cuestionó el por qué tilda a todos de la misma manera.
Afirmó que no tienen ningún certificado de flojera, que trabajan con lo que tienen y como pueden, y dijo “ahora sí somos flojos verdad, pero en el 2021 que se trataba de que los votos entraran para ese partido político, para él, ahí sí, todos éramos muy atractivos como sindicalizados o como trabajadores y no se vale”.
Castorena Berrelleza puntualizó que los someten a un estrés laboral muy fuerte, porque ellos, como trabajadores tienen que resolverle a la gente, un paciente debe ser atendido aunque no funcione el equipo de Rayos X o el tomógrafo, “no hay medio de contraste, no hay medicamento, la persona no trae ni para comer, nos cooperamos, a veces para andar comprando”.
Relató que el director del Hospital General de Fresnillo (HGF), Vladimir Lorena Hernández, precisó que desde un mes antes de la movilización, ella documentó lo que sucedía “porque no puede ser posible que en un hospital donde hay 900 sindicalizados, 578 hayan firmado que no aguantan al director ni a la jefa de enfermeras, pues es la política del terror, del miedo para invitarte a trabajar, y saludan con sombrero ajeno cuando lo más valioso es el capital humano”.
Denunció que el director de Fresnillo colocó cámaras al interior del hospital e instaló la aplicación en su celular, por lo que si una persona va al baño, sale un momento, le manda mensaje al jefe de gobierno para que lo busque de inmediato y, si no, les levantaba un acta administrativa, a eso se le llama hostigamiento, aseguró.
Comentó que se debe predicar con el ejemplo, pero él tiene incompatibilidad de horarios y ahí no es delito, pues de 7 a 11 de la mañana es maestro de la Facultad de Medicina, pero es un horario en el que también es director, pues lo es de 24 horas.
Con relación al señalamiento del secretario de Gobierno de que las protestas tienen intereses oscuros y tintes políticos, Norma Castorena indicó que no es así, que ella ha sido “una luchadora social toda su vida,” pues desde 2004 estuvo en el sindicato, antes estuvo en recursos humanos y toda la vida atendió derechos de los trabajadores.
Dijo que, como le dicen que, por militar en un partido político, está “politizando un tema o quiere llevar agua a su molino o abanderar causas porque busca algo políticamente, algo que no necesita, porque su reputación está hecha”.
Salarios desiguales
Con respecto a los sueldos que dijo David Monreal que ganaban en FGJE, que iban de los 10 mil hasta más de 100 mil pesos, la doctora Irma expuso que efectivamente existen esos sueldos, pero son los del fiscal y toda su gente, “porque sí hay muchos burócratas flojos, pero son los que ellos llevan”.
Expuso que ella tiene 20 años de trabajo de confianza y que de los mil 600 trabajadores de fiscalía sólo 130 son sindicalizados, pero hay peritos que ganan 5 mil pesos al mes, cuando hay asistentes que ganan más de 40 mil pesos.
Hostigamiento y acoso sexual
La doctora denunció que no sólo hay hostigamiento laboral, sino también sexual y que esto es permitido al interior de la fiscalía y, “si lo señalas, como mujer, te castigan, a una compañera la mandaron a distrito y a quien cometió el delito no le hicieron nada”.
“En pie de lucha”
Ambas aseguraron que seguirán “en pie de lucha, hermanándose en esta exigencia legítima”; además, hicieron extensiva la invitación a todo aquel grupo que se quiera unir, lo cual debe ser alarmante para las autoridades que ante tantos conflictos que se están suscitando los líderes estén uniéndose.
La líder del sindicato de salud afirmó que no se puede ir para atrás, porque al hacerlo sería someterse al hostigamiento, malos tratos, más burlas.
Indicó que la información que le llevan al gobernador tal vez no sea precisa, por ello no lo crucifican, pero él es el que se sube al ring y ataca a los trabajadores, “nosotros esperábamos mucho de él, esperamos que tenga empatía con nosotros”, precisó.
La doctora reiteró que hace responsable al fiscal, vicefiscales, directores y a todos los mandos de lo que le pueda pasar a los trabajadores y a sus familias porque conocen los alcances que pueden tener.