Por Miriam Serrano
Siempre que pienso que las cosas no pueden estar peor, las mismas circunstancias me demuestran que, así como todo es perfectible, sucede igual, pero de forma negativa.
La manifestación realizada por trabajadores de la Fiscalía General de Justicia del Estado es una clara muestra de la falta de oficio político de las diversas autoridades involucradas y que, lejos de atenderlo y evitar su escalamiento, lo dejaron crecer y, hasta ahora salen de manera pública las distintas voces “oficiales” a fijar postura.
Lo declarado hace unos días por el gobernador, David Monreal Ávila, lejos de abonar a que el conflicto se resuelva, provocó el enardecimiento en el ánimo de quienes, en su legítimo derecho de exigir mejores condiciones, fueron señalados como “anarquistas”.
No es minimizando los hechos como éstos desaparecerán, no es señalando, a vuelo de pájaro que todo conflicto siempre tiene tintes políticos como habrán de resolverse.
Desde el principio de su gestión, el gobernador trae un discurso sobre que la burocracia es “floja” o “huevona”, que descansan demasiado y que es necesario ponerlos a trabajar, y en el caso particular de los trabajadores manifestantes de fiscalía, no fue la excepción.
Es alarmante conocer cómo un policía de Investigación tiene a su cargo 500 carpetas que debe esclarecer cuando tiene todo en contra: el tiempo, las condiciones laborales y la misma situación de violencia que se vive hoy por hoy en la entidad.
Reitero, todo es perfectible y por supuesto que debe revisarse a fondo qué se hace en cada dependencia, cuál es la productividad que se tiene y cuál debiera ser la ideal; sin embargo, no puede perder de vista que hay leyes en los tres niveles de gobierno que respaldan a los trabajadores y que, los beneficios que se tienen bajo su amparo obedece a la lucha que, durante años, sindicatos y trabajadores han logrado.
Las conquistas laborales se han librado en diversas etapas de nuestra historia y me parece un desacierto del mandatario asumir que, aunque la mayoría de los trabajadores hacen lo que les corresponde, hay muchos otros que “no trabajan”, y bajo esta premisa “argumentar” el sinnúmero de despidos y de jubilaciones “voluntarias” para adelgazar la nómina burocrática.
Si bien, la FGJE es autónoma, en su discurso, expresó que es una situación que debe revisarse y justo a eso lo invitaron los trabajadores manifestantes, a que conozca cómo es que se lleva a cabo la labor en este organismo.
Lo que sucede en la Fiscalía General de Justicia es un tema que pudo haberse atendido de inmediato, buscando las mejores alternativas, tal y como recién lo anunciaron y no esperando que, ignorándolo éste desaparecería.
Lo que se propone en este momento, buscar la mejor vía y hacer un gran esfuerzo en el tema financiero, pudo haberse realizado desde hace un mes, cuando recién algunos trabajadores manifestaron su necesidad de aumento y homologación salarial, un alto al hostigamiento laboral y mejores condiciones para que puedan desempeñar su responsabilidad.
Lo que se puede hacer ahora, bien se pudo hacer antes de que la manifestación creciera y se tomaran las instalaciones de la FGJE en diversas áreas, pues, si así lo realizaron fue, justamente, para que los voltearan a ver y se buscara una salida.
Ojalá no cometan el error de desalojarlos con el uso de la fuerza, ojalá que prive el diálogo y se reconozca que las condiciones bajo las que se labora no son las mejores, que hay aristas que es urgente que se atiendan y que no quede todo en el discurso… AL TIEMPO.
Esta situación laboral es a nivel general de gobierno; aunque difunden qué no habrá contrataciones, se apegan según ellos a los programas de FIDE o similares para contratar a su gente que es la que no trabaja como debe, ni cumplen sus funciones por la falta de conocimiento de los programas gubernamentales y mucho menos han leído sus manuales de operación de que es lo que les corresponde hacer como funcionarios, pero eso sí criticando a sus subordinados, teniendo su horario para sus particulares reuniones sociales dentro de sus oficinas sin atender o solucionar temas que a diario se presentan. Tienen dos cargos a la vez de direcciones y lo peor es cuando son subsecretaría qué no tienen pies ni cabeza pero siii buenos glúteos para posar los donde más cómodo este, y su experiencia técnica laboral no la presentan o no la tienen, vehículos oficiales solo para funcionarios porque los servidores públicos, no cuentan con que trasladarse a los deberes de cada dependencia, pero eso sí, los funcionarios con tanque lleno es sus vehículos oficiales a resguardo para salir del estado; y la función pública brillando por su ausencia asesorando a los titulares de como hacer que si puedan utilizar estos vehículos a resguardo y así pues según cumplen con su función; reiterando qué los servidores públicos deben poner de su dinero para completar la comisión asignada, debiendo callar o los congelan, por falta de conocimiento en sus respectivas áreas. Que el Gobernador en verdad recocozca qué su gente de confianza y recomendada es la que no sabe lo que debe hacer en sus funciones, por falta de xonocimiento del área respectiva y como los puso el gober no requiren saber, solo cobrar sin trabajar, y la verdad eso si lo hacen rebien.