Por Luisa Espinosa Carmona
Se conoce como Gastritis a la enfermedad inflamatoria de la mucosa gástrica producida por factores exógenos y endógenos que producen síntomas dispépticos. La gastritis es etiológicamente multifactorial, observándose que en un solo paciente pueden intervenir múltiples factores, de los que el más común es la infección por Helicobacter pylori.
Aquellas condiciones sobre las que podemos tener un control más directo para una mejor respuesta al tratamiento, son los factores exógenos:
- Presencia de Helicobacter pylori
- AINES (medicamentos como la aspirina o el ibuprofeno)
- Irritantes gástricos
- Consumo frecuente de alcohol
- Tabaco
- Manejo del estrés y ansiedad (al manejar niveles elevados, se aumenta la producción de ácidos gástricos)
- Ayunos prolongados
Es posible que la gastritis aparezca de manera repentina (gastritis aguda) o lentamente con el tiempo (gastritis crónica). En algunos casos, la gastritis puede producir úlceras y un mayor riesgo de sufrir cáncer de estómago. Sin embargo, para la mayoría de las personas, la gastritis no es grave y mejora rápidamente con tratamiento.
Los signos y síntomas de la gastritis son:
- Malestar o dolor punzante o ardor (indigestión) en la parte superior del abdomen que puede empeorar o mejorar cuando comes
- Náuseas
- Vómitos
- Sensación de saciedad en la parte superior del abdomen después de haber comido
Si ya cuentas con un diagnóstico de gastritis o sospechas de un posible padecimiento, debes conocer ciertas pautas a seguir en tu vida diaria y ciertas recomendaciones alimentarias encaminadas a una mejor recuperación. Intenta comer de manera fraccionada unas 4-5 veces al día.
- Siempre lleva tu tratamiento de la mano de profesionales, para garantizar un tratamiento personalizado
- Evita ayunos prolongados seguidos de sobreingestas
- Come de forma tranquila y mastica bien todos los alimentos
- Evita el recostarte inmediatamente después de comer, dale tiempo a tu cuerpo de digerir los alimentos y así evitar malestar gástrico
- Evita el consumo de tabaco
- Si tienes un mal manejo del estrés y/o cuentas con diagnóstico de ansiedad, el acudir a terapia psicológica será fundamental
- Tener en su mayoría un consumo de alimentos bajos en irritantes te ayudara a evitar crisis gastrointestinales y a mejorar la sintomatología en caso de que estés cursando con una (alimentos hervidos, asados, a la plancha, al vapor, etc.)
- Evita los alimentos ricos en sal o en azúcar, los muy condimentados o especiados y los alimentos preparados en escabeche o curtidos. Puedes apoyarte del uso de hierbas de olor para la preparación de tus alimentos
- Para disminuir la sensación de irritación, procura consumir tus alimentos a una temperatura media
- Evita las bebidas estimulantes de la secreción gástrica como el café, el té, el alcohol, las bebidas de cola o las bebidas con gas
Si no se trata de forma adecuada, la gastritis puede causar úlceras y sangrados estomacales. En raras ocasiones, es posible que algunos tipos de gastritis crónica aumenten el riesgo de cáncer de estómago, especialmente si tienes un revestimiento del estómago muy delgado y hay cambios en las células del revestimiento.