Por Ana Guadalupe Rodríguez Mancha
Escoge una persona que te mire como si fueras magia…
Frida Khalo
Dentro de las múltiples etapas que presenta el ser más enigmático de la sociedad (la mujer), podemos encontrar que desde el inicio de la menarca (primera menstruación) y durante su transitar de la vida, presenta cambios visibles en su cuerpo y estado mental, todo inicia con los caracteres sexuales secundarios con el crecimiento de las caderas, las mamas, la voz y el vello facial-corporal, para pasar luego a la etapa fértil en donde el estado gravídico forma la cumbre máxima de expresión a la maternidad, o para otras mujeres la cumbre se alcanza en la explosión sexual, de crecimiento personal sin maternidad, para terminar con la decreciente secreción de hormonas en la menopausia.
Todas las mujeres en menor o mayor proporción presentar manifestaciones características del Síndrome de Ovario Poliquístico o síndrome de Stein-Leventhal”, término que se le designó en el año 1935 en honor a los dos médicos de tales apellidos por su contribución. El síndrome de ovario poliquístico tiene una incidencia de un 3% en mujeres adolescentes como en las adultas. La causa se desconoce, pero se sabe que metabólicamente existe un aumento en los andrógenos, hormona encargada de los caracteres sexuales masculinos, en combinación con la resistencia a la insulina, algunas investigaciones refieren tener una base genética en donde hijas de madres con poliquistosis ovárica, diabetes gestacional, obesidad o sobrepeso durante el embarazo aumentan el riesgo de padecerlo.
Clínicamente es una mujer que presenta cambios en el patrón del sangrado menstrual, que va desde amenorrea secundaria (ausencia de sangrado por lo menos tres meses consecutivos, hirsutismo (crecimiento excesivo de vello), acné, alopecia (pérdida anormal de cabello), obesidad androide con mayor acumulo de grasa en la región abdominal, acantosis nigricans (área oscura en pliegues) como manifestación de resistencia a la insulina e infertilidad; probablemente Magdalena Carmen Frida Kahlo Calderón, conocida como Frida Kahlo, pintora mexicana era portadora de tal enfermedad. La presencia detectada por ultrasonido de 12 o más folículos en el interior de un solo ovario hacen el diagnóstico definitivo.
El tratamiento de sostén inicia con el cambio en el estilo de vida, alimentación baja en calorías y ejercicio aérobico 150 minutos por semana, se debe personalizar el tratamiento, estabilizar la resistencia a la insulina con fármacos tipo metformina, la disminución de los niveles de andrógenos con la ciproterona, la infertilidad o amenorrea con anticonceptivos hormonales según sea el caso. Es importante la detección temprana por que las personas con síndrome X o síndrome de ovario poliquístico, tienen tres veces más probabilidades de experimentar depresión y ansiedad que las personas que no lo padecen, por lo que el acompañamiento en el diagnóstico oportuno y el tratamiento precoz con tu médico de familia se vuelve la piedra angular para una calidad de vida plena. Juntas digamos salud a la prevención.