⚠️ ALTO: ESTE PRODUCTO CONTIENE CAFEÍNA ⚠️
Perla Yanet Rosales Medina
Hacer una síntesis de los estudios que están alrededor del impacto de la cafeína en las personas, y más específicamente del café, es realmente complejo. Esto se debe a que los resultados dependen de varias variables, entre ellas el sexo, la edad, el historial clínico y la región de los individuos que están siendo estudiados, sólo por mencionar algunas características que pueden cambiar los resultados en las investigaciones.
La cafeína es el psicoestimulante más utilizado y su consumo tiene importantes efectos biológicos en el sistema nervioso. Su consumo en dosis que van desde pequeñas a moderadas es seguro e incluso beneficioso. La cafeína se encuentra principalmente en los granos de café, en las hojas de té, en los granos de cacao, en la yerba mate, en las bebidas energéticas, en la nuez de kola y en algunas sodas y alimentos con cafeína añadida.
Un consumo seguro de cafeína está relacionado con factores como la edad y el sexo. En cualquier caso, la dosis no debe superar los 180 mg por día. Además, existen recomendaciones estrictas cuando se trata de mujeres embarazadas, debido a que puede desencadenar desde bajo peso en los neonatos hasta un aborto espontáneo. Los niños y los adolescentes también están restringidos a una dosis de 45 mg y 100 mg, respectivamente.
Un alto consumo de cafeína es capaz de provocar problemas serios de salud, al grado de generar una dependencia. La cafeína resulta fisiológicamente adictiva cuando se sobrepasa los 250 mg en un consumo habitual y tóxica cuando se llega a una dosis de 400 mg por día. Estudios rigurosos mencionan que esta última dosis no tiene efectos adversos en adultos sanos. En el caso de que ya exista una adicción a la cafeína, la inhibición del consumo suele provocar un síndrome de abstinencia similar a lo que el cuerpo experimenta bajo un resfriado, es decir, dolores de cabeza, dificultad para concentrarse, cansancio y disforia.1
Aunque los efectos adversos de un alto consumo de cafeína pueden sonar escalofriantes, es más común tener una sobredosis, cuyos síntomas desaparecen con facilidad, que tener un verdadero caso de dependencia. De igual manera, estar informado y desarrollar hábitos saludables que promuevan patrones de sueño reparador pueden ser auxiliares al tratar de reducir el consumo de este estimulante.
Revisando la literatura científica, nos encontramos rápidamente con todos los beneficios que ofrece una adecuada dosis de cafeína. Siendo más específicos, estos estudios señalan que el consumo de café tiene un impacto favorable en la prevención de enfermedades relacionadas con la obesidad, esto se debe a que ayuda en la pérdida de peso, específicamente ayuda a disminuir el tejido adiposo visceral, siendo este último un marcador de riesgo cuando se trata de enfermedades cardiovasculares, diabetes tipo 2 y ciertos tipos de cáncer. El efecto del café en la prevención o control de enfermedades asociadas a la acumulación de grasa es más visible en grupos de personas mayores con riesgo de enfermedades cardiovasculares. Los mejores resultados fueron encontrados cuando el consumo de café es moderado. Por otro lado, el café descafeinado no está ligado a este tipo de estudios, dado que no se ha encontrado que tenga ningún efecto significativo2. Además del importante rol de la cafeína en los padecimientos mencionados, está demostrado que tener hábitos de un consumo moderado de cafeína reduce significativamente el riesgo de padecer Parkinson, la cual es la segunda enfermedad neurodegenerativa más común, afectando de un 2% a 3% de la población mayor a 65 años.
En resumen, el impacto de la cafeína y el café en las personas es un tema complejo y multifacético. Los estudios científicos han demostrado que el consumo moderado de cafeína puede tener beneficios, como la ayuda en la pérdida de peso y la reducción del riesgo de enfermedades cardiovasculares. Sin embargo, es esencial mantenerse dentro de límites seguros de consumo, especialmente para grupos vulnerables como las mujeres embarazadas y los niños.
Por otro lado, un alto consumo de cafeína puede tener efectos adversos, incluida la posibilidad de desarrollar una dependencia. Por lo tanto, es crucial mantener un equilibrio y estar consciente de los límites de consumo personal.
En última instancia, la cafeína y el café pueden formar parte de un estilo de vida saludable cuando se consumen con moderación y se acompañan de hábitos de vida equilibrados. Finalmente se aconseja consultar a un profesional de la salud si se tienen preocupaciones específicas sobre su consumo de cafeína.
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Referencias:
1 Amer, S. A., AlAmri, F. A., AlRadini, F. A., Alenezi, M. A., Shah, J., Fagehy, A. A., & Elsayed, M. (2023). “Caffeine addiction and determinants of caffeine consumption among health care providers: a descriptive national study”. European Review for Medical & Pharmacological Sciences, 27(8).
2 Henn, M., Babio, N., Romaguera, D., Vázquez-Ruiz, Z., Konieczna, J., Vioque, J., Torres-Collado, L., Razquin, C., Buil-Cosiales, P., Fitó, M., Schröder, H., Hu, F. B., Abete, I., Zulet, M. A., Fernández-Villa, T., Martín, V., Estruch, R., Vidal, J., Paz-Graniel, I., & Ruiz-Canela, M. (2023). “Increase from low to moderate, but not high, caffeinated coffee consumption is associated with favorable changes in body fat”. Clinical Nutrition, 42(4), 477-485. https://doi.org/10.1016/j.clnu.2023.02.004
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Amer, S. A., AlAmri, F. A., AlRadini, F. A., Alenezi, M. A., Shah, J., Fagehy, A. A., & Elsayed, M. (2023). “Caffeine addiction and determinants of caffeine consumption among health care providers: a descriptive national study”. European Review for Medical & Pharmacological Sciences, 27(8).
Henn, M., Babio, N., Romaguera, D., Vázquez-Ruiz, Z., Konieczna, J., Vioque, J., Torres-Collado, L., Razquin, C., Buil-Cosiales, P., Fitó, M., Schröder, H., Hu, F. B., Abete, I., Zulet, M. A., Fernández-Villa, T., Martín, V., Estruch, R., Vidal, J., Paz-Graniel, I., & Ruiz-Canela, M. (2023). “Increase from low to moderate, but not high, caffeinated coffee consumption is associated with favorable changes in body fat”. Clinical Nutrition, 42(4), 477-485. https://doi.org/10.1016/j.clnu.2023.02.004
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“Uncommon grounds”. (s. f.). Google Books. https://books.google.com.mx/books?hl=es&lr=&id=njNk0ojWXH8C&oi=fnd&pg=PR5&dq=history+of+coffee+&ots=i-bwXXPdYY&sig=xFxnJMMjXjLFYda7esrAhDOrBR0&redir_esc=y#v=onepage&q=history%20of%20coffee&f=fal
Wang, C., Zhou, C., Guo, T., Jiaerken, Y., Yang, S., Xu, X., Han, L., Huang, P., Xu, X., & Zhang, M. (2023). “Current coffee consumption is associated with decreased striatal dopamine transporter availability in Parkinson’s disease patients and healthy controls”. BMC Medicine, 21(1). https://doi.org/10.1186/s12916-023-02994-5
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