Por Luisa Espinosa Cardona
El estreñimiento es un concepto que se menciona con gran frecuencia, pero malentendido la mayoría de las veces; se reconoce erróneamente sólo como la incapacidad de defecar, cuando en realidad hay un gran espectro y niveles de estreñimiento que son poco identificables ya que pueden llegar a ser normalizados por la persona que lo padece.
Dentro de los factores de riesgo para el desarrollo del estreñimiento, se encuentran:
* Ser adulto mayor
* Ser mujer
* Tener ayunos prolongados
* Uso frecuente de laxantes
* Consumo deficiente de alimentos
* Estar deshidratado
* Tener una alimentación baja en fibra
* Hacer poca o nula actividad física
* Tomar ciertos medicamentos, entre ellos: sedantes, analgésicos opioides, algunos antidepresivos o medicamentos para bajar la presión arterial
* Vivir con depresión
* Vivir con algún trastorno de la conducta alimentaria
Cuando se habla de estreñimiento, se engloba tanto la escasa frecuencia de defecación como la dificultad para expulsar las heces. Dentro de los parámetros normales de defecación se establece una frecuencia de 3 exposiciones máximas por día y un mínimo de 3 por semana. Para poder establecer un diagnóstico de estreñimiento, como ya se mencionó no sólo se evalúa la frecuencia, también se toma en cuenta:
* Hacer esfuerzo excesivo
* Dolor en el área del recto y ano
* Si las heces son duras
* Sensación de evacuación incompleta
* Distención abdominal
* Dolor asociado con los movimientos intestinales
* Dolor en la parte baja de la espalda acompañado de fatiga y dolores de cabeza
Si te sientes identificada/o con alguno de los síntomas mencionados, debes tener en cuenta que no es normal y es probable que estés viviendo con este trastorno intestinal.
La causa más frecuente de padecer estreñimiento es tener una alimentación deficiente; pobre en fibra, agua y cantidad de alimento. Para mejorar la motilidad intestinal y tener evacuaciones completas e indoloras, te recomiendo lo siguiente:
* Acudir con un especialista para obtener un tratamiento personalizado
* Aumentar tu consumo de líquidos al día, en especial el de agua simple
* Aumentar el consumo de alimentos altos en fibra: verduras con piel, frutas, cereales integrales y leguminosas
* Evitar ayunos prolongados
* Evitar el consumo de laxantes (el consumo de estos sólo aumentará el malestar, ya que disminuye la normalidad en la motilidad intestinal, destruyen la microbiota y a mediano y largo plazo pueden causar desnutrición por malabsorción intestinal)
* Evitar ser sedentario
* Tener una alimentación que sea suficiente para cubrir tus requerimientos nutricionales diarios
Tu salud intestinal es de suma importancia, pues una adecuada digestión no sólo tiene impacto en el no desarrollar estreñimiento, ésta tiene un impacto directo a tu calidad de vida, ayudando a tener una mejor absorción de nutrientes que favorece al sistema inmunológico.