CAROLINA DÍAZ FLORES
El sistema braille, también llamado cecografía, es un sistema táctil de comunicación que se utiliza por personas ciegas para adquirir información de diferente naturaleza, desde avisos o anuncios, hasta novelas o textos científicos. Este sistema lo desarrolló Louis Braille en el siglo XIX, pero ha tenido distintos cambios y adaptaciones, a lenguajes y simbologías diversas. Su funcionamiento es básicamente patrones de puntos en relieve, que representan: letras, números y signos de puntuación. Se aplica principalmente para alfabetizar y brindar educación a personas ciegas, además para etiquetar algunos productos como alimentos o medicamentos.
Aunque su importancia es innegable, la realidad es que el acceso a su enseñanza y la disposición de materiales que cuenten con sistema braille es sumamente limitado, aún cuando la tecnología permite generar su impresión accesible, no se ha generalizado su uso ni en el espacio público ni en la vida privada de la mayoría de las personas ciegas. Esto se da por una falta de sensibilidad de la población general, pues es una necesidad de una pequeña proporción de la población. Por ejemplo, en México se estima que alrededor de 415,000 personas padecen ceguera, esto representa sólo el 0.3% de todos los mexicanos. Aun cuando esta cifra sea aparentemente baja, el sistema braille es una vía eficiente de adquisición de información para las personas ciegas.
El sistema braille es una herramienta fundamental para la inclusión social, a nivel mundial se le considera como esencial para que las personas ciegas se integren de forma total y autónoma en la vida en comunidad. Si se consideran las facilidades tecnológicas para generar servicios y productos que cuenten con sistema braille, es evidente que el sistema braille no forma parte de las políticas públicas en nuestro país. Para poner aún más en perspectiva la falta de inclusión de este sistema, se estima que sólo del 10% al 15% de las personas ciegas en México lo domina, esto significa que la gran mayoría de las personas ciegas no cuenta con una de las herramientas más valiosas de adquisición de información para sus circunstancias de vida.
