Miriam Serrano
Zacatecas es un Estado fascinante, totalmente colonial con mucho que ofrecer a turistas nacionales y extranjeros, pero todo se va al diablo cuando esos turistas vienen y a cambio de su inversión… se les ofrece puras miserias.
Sé que algunos me dirán exagerada, pero no es así, por el contrario, me quedo muy corta en comparación con la realidad que día con día viven quienes tienen la buena disposición de venir a la “tierra bendita” a conocer y se llevan cada mal sabor de boca por el pésimo servicio que reciben en los hoteles y demás comercios, que por cierto abren súper tarde.
Y a las pruebas me remito, hace menos de una semana se llevó a cabo el décimo primer simposium de Seguridad de Minería, al que acudieron poco más de 500 asistentes de estados como Coahuila, Chihuahua, Guerrero, Sonora, Durango y Zacatecas, donde hubo puras vergüenzas, neta.
¿Pueden creer que hay hoteles a los cuales no hay manera de comunicarse ni telefónicamente ni por medios digitales?, pues así es, y soy testigo fehaciente de ello, tuve que ir personalmente a un hotel ubicado en el Centro Histórico para pedir alguna manera de comunicación, ya que personas de la industria minera requerían hospedaje los días del simposium y, pues no había manera de comunicarse.
Ya luego platicando con nuestros amigos mineros, conocí historias tan deleznables, hoteles que se anuncian y pregonan como de cinco estrellas con “cucarachitas” en su haber, ¿qué tal?, ese es el nivel que le ofrecemos a los propios y extraños.
Y bueno, si nos adentramos al tema del resto de los servicios, ¿creo que es momento de empezar a llorar o de encabronarnos más?, porque la comida, generalmente es mala, y no sólo el producto, sino la actitud y sí, también soy testigo de ello, pues cuando acudes a los establecimientos hasta parece que vas “a pedirle un taco” o, mucho peor, “a pedir fiado”, porque la actitud es déspota, grosera, salvo, como siempre sus honrosas excepciones.
Y bueeeeno, si nos ponemos a analizar la hora de apertura, pues mucho peor, ahí por las frescas 11 de la madrugada, porque más temprano se enfrían y hasta se enferman.
Aquí es donde viene la pregunta del millón ¿qué carajos está haciendo la Secretaría de Turismo para atender estas fallas garrafales?, pues pura simulación, el clásico “hacen como que me pagan, hago como que trabajo”, de verdad, no es exageración ni ganas de joder, es una realidad que me da pena, coraje e impotencia porque no hay manera de defender lo indefendible.
Es inconcebible como sólo necesitamos salir de la capital y zona conurbada, a otro municipio para darnos cuenta que los servicios están mucho mejor que donde debiera, que es el centro del Estado.
Creo que los asesores del gobernador, claro, si tiene el interés y la humildad de escuchar, deberían decirle que uuuuurge un cambio de fondo en dicha secretaría, siempre y cuando realmente le interese que sigan visitando Zacatecas.
Y si a eso le agregamos la inseguridad, pues como decía mi abuelo “ya nos cargó el payaso”, porque con tanto muerto y desaparecido, los turistas lo menos que quieren es convertirse en noticia nacional con tantas cosas terribles que pasan en nuestra “tierra bendita”, esto ¿cuándo cambiará?, pues algún día… AL TIEMPO.