Othniel Ruiz
Siendo una de las enfermedades con mayor prevalencia en la población en edad adulta, es poca la atención que se le da a esta patología durante sus etapas iniciales debido a que en la mayoría de los casos cursa asintomática, es hasta que el daño irremediable ocasiona movilidad y pérdidas de los órganos dentarios.
A esta enfermedad se le adjudican múltiples factores desencadenantes como el hábito del tabaquismo, diabetes sin un control adecuado, medicamentos, cambios hormonales en la mujer y otras enfermedades; sin embargo, la causa más común para desarrollar enfermedad periodontal es la ausencia o ineficacia del cepillado dental, lo que ocasiona presencia de sarro alrededor de los órganos dentarios.
Visitar con regularidad a un profesional odontólogo para evitar la aparición del sarro, diagnosticar la enfermedad en etapas tempranas y corregir las repercusiones originadas por la acumulación del sarro adherido a superficies dentales es garantía de gozar una salud bucodental muy buena, al igual que se conservarán por mucho tiempo los órganos dentales.
Algunos signos y síntomas que se presentan en la enfermedad periodontal son: inflamación y enrojecimiento de las encías alrededor de las coronas dentarias, sangrado y mal aliento, esto en etapas iniciales donde se conoce como gingivitis. Mientras la enfermedad periodontal no sea tratada en su etapa temprana, se volverá más agresiva comenzando a atacar y destruir el hueso que sujeta los órganos dentarios, que repercute en movilidad o pérdida de piezas dentales, esta etapa se conoce como periodontitis.
Hacerse limpieza dental una o dos veces por año junto con una buena higiene dental con regularidad, el uso de hilo dental y enjuague bucal, son la mejor forma de prevenir la enfermedad periodontal, pues siempre he dicho a mis pacientes que no hay algo más económico que utilizar cepillo, pasta, enjuague e hilo dental para mantener una excelente salud bucodentaria. Así mismo disminuye el riesgo de presentar caries dental.