GIBRÁN ALVARADO
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Después de las primeras impresiones respecto a la primera entrega de Star Wars, el reconocimiento de los personajes y el buen sabor de boca, en este segundo comentario sobre la saga, debo reconocer el papel de George Lucas como el director visionario que tuvo la fe en sus ideas y dio pauta a uno de los hitos en la historia del cine, la ciencia ficción llevada, como en el precedente de 2001: Odisea del espacio (1968), hacia una renovación y a una grandeza que quizá aún goza, pese a los deslices del cine comercial. Lucas, con el apoyo de Coppola y con la capacidad para sintetizar todo un universo de caracteres, en este episodio V utiliza una bifurcación argumental que al final se entrelaza de buena forma.
La búsqueda de una base, la desaparición de Luke, el “fantasma” de Obi-Wan Kenobi y la primera aparición del maestro Yoda son parte de los elementos esenciales de esta película, a través de ellos, se inicia una pugna entre las fuerzas del mal y del bien, hay muchas persecuciones, diversos enfrentamientos que son el telón de las lecciones que deben ser aprendidas. El grupo de la rebelión se separa, cada uno tiene que afrontar determinadas pruebas y se revelan varios antecedentes de la vida de Darth Vader, quien, debo confesar, me pareció un personaje débil en el primer largometraje de la saga, un ente malvado que sólo sigue las órdenes de un superior… en el episodio V comienza a tomar más fuerza, pero aún sigue supeditado a los designios del Emperador.
A su vez, Luke tiene que prepararse para convertirse en un Jedi, debe aprender a ser prudente y a usar la fuerza de una forma adecuada; en un inicio rehúye a este compromiso, aunque, poco a poco, comienza a creer en las enseñanzas de Yoda. Hay que prepararse para ser prudente, usar la fuerza para el bien. Se deben tomar decisiones, seguir un entrenamiento y no buscar el camino fácil. Además, el final deja abiertas las posibilidades para continuar con esa aventura, esa pugna por mantener el control del universo, esto aún no acaba y me parece un logro total que George Lucas, en estas dos entregas mantenga la dinámica y mantenga en vilo al espectador, aún van creándose atmósferas para lo que será el cierre de esta primera trilogía de Star Wars.
Hasta el momento, y para ser un primerizo en esta saga, me han parecido muy buenas películas, empiezo a comprender el porqué de la vitalidad de sus personajes, de sus elementos y el papel que ha tenido en la ciencia ficción posterior y en la historia del cine. A seguir con la siguiente y espero que el cierre sea bueno, como hasta el momento.