SI PUDIERA MIRAR MI PROPIA ALMA,
en ese mismo instante sé que me quedaría ciega.
El dolor es una caricia dormida.
Un hábito.
Un miembro más de mi cuerpo.
Hay personas que son faros
Permanecen en pie con el azote de las olas
Su cuerpo es luz, pero su brillo no les pertenece
Siempre pienso en el mar cuando pienso en ti
mis ojos iluminados y tú en la lejanía
Hay tantos mares como amores en el mundo
Yo he decidido anclar en la tierra
y honrar los muros y las piedras
porque no podría besar ni hacerle el amor al agua.